No todos estamos de vacaciones...

Para evitar sorpresas desagradables a la vuelta de las vacaciones este verano, sigue estos consejos:

Antes de emprender la ruta de vacaciones…

Recuerde registrar sus órdenes de pago.

Si espera una factura antes de su salida, averigüe con su proveedor el importe facturado para registrar su orden de pago. Saldrás tranquilo.

Solicita facturación digital.

Sabiendo que estarás en el extranjero con acceso a tus correos electrónicos, solicita recibir tus facturas digitalmente. También puedes avisar a tus proveedores de tu ausencia, especialmente si será de larga duración. Por último, recuerda activar las respuestas automáticas en tu casilla de correo electrónico para indicar tu periodo de ausencia.

Durante tus vacaciones…

Pídale a un ser querido que revise su correo.

Ya sea un familiar, un amigo o un vecino, pídele que revise tu buzón. Esta persona de confianza podrá enviarle cualquier factura vencida cuyo pago no pueda esperar a su devolución, o cualquier otra solicitud urgente. Y, en caso de ausencia prolongada, ¿por qué no designar a esta persona para que se encargue de su administración?

Descubre tu aplicación bancaria.

Hoy en día, la mayoría de los bancos han implementado una aplicación móvil. Es hora de probarlo. A través de estas aplicaciones podrás consultar tus cuentas bancarias a distancia y realizar tus pagos, registrar tus domiciliaciones, introducir tus órdenes de pago, etc. Estas aplicaciones deben ser completamente seguras. Nada te impide utilizar tu homebanking durante las vacaciones, siempre que no olvides tu caja de conexiones en las maletas.

Una vez de regreso a casa...

Es demasiado tarde !!! Si y no. Sí, estás retrasado en tu pago. Y la aplicación de las condiciones generales de pago te provocará costes adicionales. Y no, nunca es demasiado tarde para pagar esa factura. Incluso si esto se ve incrementado por cargos por pagos atrasados, debe pagar esta cantidad rápidamente. Cuanto antes se ponga en orden, menos cargos por pagos atrasados tendrá que pagar. Si su proveedor le envió una factura durante su ausencia y usted no la ha respetado, los costes de acuerdo con las condiciones generales de pago serán su responsabilidad. Y si su pago demora demasiado, corre el riesgo de recibir una carta de notificación formal de una empresa de cobranza.

Las vacaciones o ausencia de larga duración no justifican el pago atrasado. Depende de usted organizarse para evitar retrasos en el pago. Cuando viaja al extranjero, sus proveedores no paran sus actividades y los retrasos en los pagos pueden ponerles en dificultades financieras.