El estrés financiero es la tensión emocional relacionada con el dinero. Muchos de nosotros enfrentamos dificultades financieras e incertidumbre durante este momento difícil.
El dinero puede ser una fuente común de estrés, ya sea por la acumulación de deudas, la dificultad para cubrir los gastos mensuales o la dificultad para aumentar los ingresos. El estrés financiero puede volverse problemático si interrumpe su vida diaria. Puede causar problemas de salud, tanto físicos como emocionales. Aprender a sobrellevar el estrés financiero y administrar su situación financiera de manera efectiva puede estabilizar su sentido de control sobre su vida. De esta manera, puede construir un futuro seguro y estable.
Algunos de los efectos del estrés financiero incluyen aislamiento social, dificultades en las relaciones, aumento (o pérdida) de peso, dolores de cabeza, depresión, ansiedad e insomnio.
Aquí hay 3 pasos que puede tomar para reducir y manejar su estrés financiero:
- Haz un balance de tus finanzas
Cree un presupuesto que incluya todas las fuentes de ingresos y realice un seguimiento de todos sus gastos. Es importante enumerar sus deudas para evaluar su situación financiera, identificar sus hábitos de gasto y sus factores desencadenantes y eliminar el gasto impulsivo.
Encuentra alternativas a los pequeños gastos en tu presupuesto mensual y reconduce esos montos a saldar tus deudas y ahorrar. Crear formas pequeñas de reducir sus gastos diarios realmente puede ayudarlo a liberar dinero extra para pagar sus facturas. Planifica tus compras buscando las mejores ofertas y promociones.
Trate de crear fuentes adicionales de ingresos. Ten en cuenta el tiempo libre, los conocimientos y las habilidades que tienes. Tal vez un pasatiempo que tengas te ayude a ganar dinero extra (como el arte, el dibujo, la escritura).
Comprender la deuda es el primer paso para salir de ella. Presta mucha atención a las tasas e intereses y haz un plan financiero con los pasos que quieres dar. Muchas personas se sienten más motivadas para pagar sus deudas si ven un progreso visible. Recuerde mantenerse enfocado en sus metas y no se desanime aunque parezca difícil al principio.
- Maneja tu estrés general
Controla tus emociones y cuida tu salud. Puedes practicar una técnica de relajación y aumentar tu autoestima. No descuides tu sueño y recuerda estar agradecido por las cosas buenas de tu vida. Informe a su médico si tiene una afección médica preexistente que podría empeorar con el estrés.
Habla con tus amigos y familiares. Tener un sistema de apoyo puede ayudarlo a lograr sus objetivos. Pida ayuda y considere obtener asesoramiento profesional. Según el lugar donde viva, hay una serie de organizaciones que ofrecen asesoramiento gratuito sobre cuestiones financieras, como la gestión de deudas, la creación de un presupuesto o la búsqueda de empleo.
Tómese el tiempo para divertirse con su familia (a un menor costo). Puedes hacer actividades, paseos por el parque, pasar el rato y jugar con tus amigos. Evite la tentación eligiendo una alternativa a las compras. Lleve solo la cantidad de dinero que pueda gastar.
- Haz un plan y apégate a él
Comuníquese con sus acreedores si tiene dificultades para pagar sus cuentas o controlar sus deudas. Analice las diferentes opciones de pago y comprenda el ciclo de la deuda. Si identifica el problema financiero y encuentra una solución, puede poner su plan en acción. Supervise su progreso y, lo que es más importante, no permita que los obstáculos o contratiempos lo depriman.
No te olvides de practicar la conciencia del dinero. Es importante tener una comprensión básica de los conceptos financieros para tomar buenas decisiones financieras. La conciencia financiera es la capacidad de administrar eficazmente los recursos financieros a nivel personal. Esto incluye tomar decisiones de compra que sean rentables y comprender los intereses de los préstamos y las inversiones.
Tomar una decisión financiera a la vez evita sentirse abrumado. Cuando se toma el tiempo para tomar decisiones importantes, tiene tiempo para considerar alternativas y obtener otras opiniones. Para tomar mejores decisiones financieras, no basta con tener toda la información financiera. Necesitas claridad sobre tus valores y prioridades y reconocimiento de tu realidad financiera.
El estrés financiero puede surgir en muchas situaciones y bajo diversas circunstancias. Mientras revisa sus deudas y sus hábitos de gasto, recuerde que cualquiera puede tener dificultades financieras, especialmente en momentos como este. Concéntrese en los aspectos que puede controlar a medida que busca avanzar. Una vez que salga mentalmente de su propia situación, podrá pensar de manera más clara y estratégica, en lugar de emocionalmente, lo que probablemente lo llevará a una mejor solución a largo plazo para usted.