Guy es fisioterapeuta. En enero de 2020 se lanzó como independiente. Iniciar su negocio genera bastantes costos para encontrar un local adecuado o incluso adquirir equipo médico. Sin embargo, se muestra muy positivo y entusiasmado con la idea de realizar su trabajo que le apasiona.
En marzo de 2020, una enfermedad respiratoria aún desconocida lo puso todo en duda: el Covid. Guy tiene que viajar más. Ya no puede recibir a sus pacientes en el consultorio en las mismas condiciones. Debe invertir en equipos de desinfección, trajes médicos, mascarillas, etc. sin mencionar las dificultades para obtener estos suministros. Hace su trabajo pero con miedo en el estómago. Esta enfermedad se está convirtiendo en una pandemia. Inicialmente, los gobiernos apuntan a las profesiones de contacto, cerrando sectores tras sectores. Guy está indefenso, atado de pies y manos.
Después de dos años de cierre/reapertura, finalmente retoma sus actividades con mayor o menos normalidad. Desafortunadamente, aunque sus pacientes necesitan su atención, que en su mayor parte es reembolsada por fondos mutuos, Guy tiene que lidiar con cancelaciones de citas por diversos motivos, así como con múltiples servicios impagos.
Afortunadamente, un colega le aconsejó que utilizara la aplicación MindYourBills para realizar un seguimiento de sus facturas. La aplicación es gratuita y, en caso de un servicio no pago, ofrece enviarlo fácilmente para su recogida. Después de una prueba concluyente, quedó convencido. Con un seguimiento regular y simplificado del pago de sus servicios, podrá por fin dedicarse a su profesión, a su pasión y a hacer el bien a sus pacientes.