¿Casi 18?

¡Pronto la mayoría! A los 18 años, la vida está por delante con su cuota de responsabilidades y gastos. Aquí hay 4 tipos de gastos que enfrentará.

Cargos mensuales

Como muchos jóvenes, a los 18 años quizás quieras despegar y empezar a buscar alojamiento. Tanto si optas por un kot como por un piso compartido, además del alquiler tendrás que tener en cuenta los gastos mensuales (agua, gas, electricidad pero también internet y suscripción de teléfono móvil). ¿Cuáles serán tus ingresos? ¿Seguirás recibiendo ayuda financiera de tus padres o no? Muy rápidamente, las facturas llegarán e incluso se acumularán. Deben pagarse a tiempo si desea evitar costos adicionales o incluso recibir una notificación formal de una empresa de cobro de deudas. La vida está hecha de elecciones. Incluso a los 18 años, tus decisiones pueden tener consecuencias importantes.

Los seguros

Su permiso de conducir en su bolsillo es bueno. ¡Un coche o una moto es mejor! Además del precio de compra del vehículo, tendrás que asegurarlo. No se debe descuidar el coste del seguro para un conductor joven. No dude en ponerse en contacto con varias compañías o corredores de seguros para conocer los importes de las primas a pagar antes de adquirir su primer vehículo. ¡Más vale prevenir que curar! Tampoco olvides asegurar tu alojamiento. Esta es una obligación legal.

las suscripciones

Ya sea que elija suscribirse a una revista semanal o a un gimnasio, es importante que se asegure de poder pagarlo todos los meses. Debes tomarte el tiempo para leer atentamente el contrato antes de comprometerte. La mayoría de los contratos incluyen cláusulas específicas para suspender o detener la suscripción. Léalos atentamente y guarde una copia de este contrato firmado. Si posteriormente tuviera que suspender o cancelar su suscripción, vuelva a leer atentamente estas cláusulas que ha aceptado. Una ruptura unilateral a menudo genera problemas administrativos o incluso financieros. ¡Prevenido vale por dos!

Gastos excepcionales

Incluso si estás bien organizado, nadie puede decir lo que te deparará el mañana. Puede que estés bien asegurado pero nadie está a salvo de un gasto excepcional. A los 18 años, si todavía eres estudiante, seguirás bajo la mutua de tus padres. ¿Está cubierto por un seguro adicional, un seguro de hospitalización? Consulta con ellos previamente. En tu casa quizás todo sea nuevo. Desafortunadamente, algunas cosas se dañan muy rápidamente. Es mejor estar organizado y, cuando el equipo muestre signos de debilidad, ahorrar dinero cuando sea posible. Para que puedas afrontar su sustitución cuando llegue el momento.

A los 18 años, tienes muchos horizontes disponibles. Elegir un camino significa afrontar sus ventajas y desventajas, sus libertades y sus responsabilidades, tanto jurídicas como financieras. ¡Has sido notificado y el equipo de INTERNATIONAL RECOVER COMPANY ® te desea un feliz cumpleaños!